*Post creado por nuestra colaboradora Anna
Nos levantamos temprano y tomamos un pobre desayuno en la recepción del hotel, recogemos los bártulos y nos dirigimos al centro de turismo de Natchez para recopilar información sobre todas las casas y mansiones que se pueden visitar.
Ofrecen varios paquetes y sinceramente, no es barato. Así que al final decidimos pasar por algunas de ellas, pero sin visitar los interiores.
Las casas de Natchez que vas viendo por las calles de por sí ya son espectaculares:
La primera parada es Stanton Hall, en el mismo centro de la ciudad, es una enorme mansión blanca en la que puedes pasear por sus jardines sin comprar ningún tíquet.
La segunda visita fue la más popular, Longwood. En esta, en teoría, hay que entrar con tíquet. Nos lo pidieron al entrar con el coche por el caminito que lleva a la mansión, además lo ponía en un cartel, pero le dijimos al vigilante que sólo queríamos ver la mansión por fuera y nos dejó pasar guiñando un ojo. Mira que bien!
Los jardines de ésta son espectaculares y de repente entre los árboles aparece la mansión:
Al lado tiene una antigua cabaña:
Después de la visita «de estranquis» vamos hasta Melrose, habíamos decidido visitar el interior de ésta ya que nos dijeron que era la mejor conservada. Pero que decepción al llegar, nos hacen decidir en menos de un minuto si queremos hacer la visita guiada o no ya que sale un tour en seguida, al ver que la casa es muy pequeña y lo poco amables que fueron al presionarnos de esa manera, decidimos que no la haríamos, así que otra vez nos quedamos por los jardines a pasear.
Una vez «visitadas» las mansiones, vamos camino a Louisiana, uno de los platos fuertes del viaje, dónde tenia ya muchas ganas de llegar.
Y qué mejor que con esta preciosa canción:
Seguimos por la Ruta 61 hacia el sur, en la misma carretera, a poco más de una hora de Natchez y ya en el estado de Louisiana, está The Myrtles Plantation, una plantación que dicen que está encantada. Como a mi madre y a mi nos han gustado siempre estas cosas y las historias de fantasmas, decidimos parar a echar un vistazo.
AQUÍ encontraréis toda la información
El tour eran 10 dólares, un precio más que razonable, así que nos apuntamos para el siguiente.
La visita fue muy interesante, la señora que nos guió por la casa se metía mucho en el papel y nos contaba las historias de manera muy apasionada, no se cuantos fantasmas contamos al final de la visita, pero había un montón!
La plantación es a la vez restaurante y hotel, vimos en tripadvisor que estaba muy bien valorado, así que como se nos había hecho la hora de comer nos quedamos allí mismo. Teníamos ganas de probar comida criolla o cajún, pero al ser vegetarianas, sólo pudimos comer tomates verdes fritos.
Después de comer la idea era llegar del tirón hasta Breaux Bridge dónde teníamos reservada una cabaña en un lago, así que cogimos la carretera y ya no la dejamos hasta nuestro destino.
De vez en cuando el GPS insistía en hacernos cruzar el río en un ferry inexistente, así que nos topábamos cara a cara con el Mississippi:
El camino a la cabaña nos llevaba por paisajes espectaculares, Louisiana tiene otro color, otro ritmo…
Y al fin llegamos, el sitio se llama Country Charm Bed and Breakfast, dónde alquilamos un antiguo granero restaurado para un par de noches. Es un lujo que nos permitimos ya que estaba llegando el fin de nuestro viaje.
Y ese era nuestro granero, bueno, sólo la planta baja:
Llegamos bastante temprano, así que nos dio tiempo de descansar un poco en una hamaca frente al lago, luego ir a comprar comida en un supermercado y de intentar otra vez ir a un restaurante cajún, pero sólo hay carne (de caimán, de rana, etc…) así que nos rendimos…vamos a la cabaña a cenar un poco de pan con queso 
Eso si, antes de irnos a dormir reservamos a través de los dueños del B&B una excursión a los bayous para ver caimanes. Así que mañana, si no llueve, nos vamos al Lago Martin.
***No hay duda que la canción que va a sonar hoy será esta***
A la mañana siguiente amaneció algo nublado, pero afortunadamente sin lluvia, así que cogemos el coche y nos acercamos hasta el Martin Lake para hacer una excursión por los bayous en barca.
Llegamos muy pronto, y mientras se hace la hora del tour, damos una vuelta por los alrededores del lago. Se empieza a ver fauna, como tortugas y algunos pájaros. Pinta muy bien la cosa!
Incluso nos vinieron a recibir estas preciosidades:
Unos minutos antes de la hora en que habíamos quedado con los del tour aún no hay nadie en el lugar, empezamos a pensar que no vendrán…hasta que llega una familia y nos dicen que ellos también vienen a hacer la excursión. Nos quedamos más tranquilas…
Al cabo de un rato llega una barca llena de gente, se bajan y nos empiezan a llamar, de repente aparece más gente que hasta ahora no habíamos visto, son los que irán con nosotras en la barca.
Las dos horas siguientes cuestan mucho de describir con palabras, fueron increíbles, así que dejaré una colección de fotos. Un lugar mágico sin duda, y recomendable al 100% si se baja hasta Louisiana.
Después de esta experiencia por los bayous, volvimos a nuestra casita del lago para comer y pasar el resto de la tarde relajándonos en el jardín, ya que mañana empieza la locura en NOLA.
*Post creado por nuestra colaboradora Anna
Irene dice
Hola Anna,
Qué apetecible tu viaje, gracias por describirlo.
La próxima semana viajo con mi hermana a New Orleans unos días. Queremos ver un bayou y quería preguntarte cuál es el que viste tú y con que tour lo hiciste.
Saludos
LaNaranjaViajera dice
Buenas! perdona este viaje lo hizo una colaboradora… Anna… Pero le pregunto a ver si me da tiempo de contestarte antes que vayas!