*Post creado por nuestra colaboradora Anna
Después de la gran experiencia de ayer por los bayous, decidimos que el sur nos gusta. Y mucho! Nos quedan ya pocos días pero nos vamos a empapar de este espíritu sureño tan especial.
Seguimos con el blues:
Por la mañana después de un buen desayuno (en el B&B nos dejaron muchísima comida en la habitación, un lujo) nos vamos más al sur aún, para recorrer la 90, carretera que transcurre a través de ciénagas, lagos, ríos, en definitiva, el corazón del delta del Mississippi.
Llovió durante todo el trayecto, así que no tengo muchas fotos de este lugar…
Los paisajes recuerdan mucho a la serie True Detective I, de hecho parte de la serie se rodó en esta zona, sobretodo en South Vacherie, así que de nuevo, metidas en una película, disfrutamos de la carretera, que para eso son los RoadTrips.
Después de este recorrido subimos otra vez hasta nuestro primer destino del día, la Oak Alley Plantation. Una de las plantaciones más populares de la zona, y en la que se han rodado también muchas películas.
Se nos hizo la hora de comer allí, así que comimos en el mismo restaurante que hay en la plantación, muy recomendable, buena comida y a buen precio.
Aquí recuperamos otra vez la 61, la intención era visitar alguna otra plantación, pero nos tiraba más llegar a Nueva Orleans, así que seguimos nuestro último tramo de la 61 hasta nuestro último destino, NOLA.
Primeros claxon, primeras imprudencias al volante, gente chillando por las ventanillas de los coches. Efectivamente, Nueva Orleans es diferente.
Llegamos a nuestro hotel, el Olde Town Inn New Orleans, en el cual pagamos un dineral por una habitación individual, aún así fue de lo más económico que encontramos cerca del French Quarter. Estaba en Marigny, un barrio de casitas de colores precioso en el que apetece pasear y entretenerte mirando las casas, la gente y las calles aún engalanadas por el Mardi Gras.
No tardamos mucho en salir de esa minúscula habitación para ir andando hasta la Frenchmen St., ya echábamos de menos un poco de música en directo y la elección fue insuperable, se coronó como nuestra calle preferida.
Después de pasear por las calles y de unas cuantas horas ya de música, cenamos y volvimos al hotel, mañana toca patear la ciudad.
No puedo escribir la etapa de NOLA sin poner como banda sonora una de las Brass Bands más populares de la ciudad:
A la mañana siguiente, coincidimos en el desayuno con una pareja de Barcelona, y estuvimos intercambiando información un buen rato, ya que ellos acababan de visitar NOLA y se iban hacia el norte de dónde nosotras veníamos. Así que con unos cuantos buenos consejos salimos a la ciudad a patearnosla.
No visitamos nada en concreto de Nueva Orleans, nos limitamos a andar por sus calles, ver a la gente, las casas, escuchar música a cada rato, beber cervezas locales, asisitir a un festival en la plaza del Congo, dar un pequeño paseo por el barrio de Tréme, entrar en garitos, en tiendas de Vudú, hablar con algún lugareño, comer, beber y en definitiva, disfrutar sin prisas de esta tan especial ciudad.
Como resumen pongo algunas fotos
Nota: Para el que quiera ver el Banksy de la chica con el paraguas, está a la entrada del barrio de Tréme, en la misma N Rampart St. con la Kerlerek st. si no recuerdo mal.
Para mi gusto, me faltaron algunas noches en NOLA, por desgracia a la mañana siguiente ya volvíamos a casa, y me daba la sensación que a puras penas me había presentado con esta ciudad. Entiendo que hay a quien no le pueda gustar, a mi madre misma, le parecía insegura y llena de personajes raros y al poco de anochecer ya nos fuimos al hotel a petición suya y muy a mi pesar, nos costó nuestra última discusión madre-hija del viaje.
A mi no me pareció tan insegura, acostumbrada a Barcelona y a sus personajes de los barrios del Raval y demás, me pareció una ciudad con muchísima personalidad, dónde (a diferencia de Barcelona) la música forma parte de su día a día, dónde se puede encontrar a gente super interesante y en la que me perdería seguro unas semanas conociéndola más a fondo. Seguro que NOLA es mucho más que el French Quarter y sus alrededores. Así que tendré que volver. Seguro que lo haré.
Así que como dice Tom Waits:
Y aquí termina nuestra aventura de 2 semanas por las carreteras de EEUU recorriendo 2.783,682km, sobreviviendo a tornados, inundaciones y caimanes. Pero sobretodo, disfrutando mil de cada rincón visitado, sintiendo la música en la piel y guardándonos esta experiencia cómo otro tesoro más.
*Post creado por nuestra colaboradora Anna
Domingo Garcia dice
Muchas Gracias por compartir vuestra experiencia,ciertamente viajar por USA es increible ,vuestra ruta es casi la unica que nos queda por hacer ,en terminos genericos por EEUU despues de visitarlos de costa a costa nos queda como colofon la ruta 61 ,asi que ha sido un placer leerte, quizas como apunte te puedo decir que el tema Moteles es muy asequible si te haces con alguna de las muchas revistas de Descuentos y vas buscando dia a dia las ofertas de los lugares por donde piensas ir a dormir y comer, asi lo he hecho yo en mis mas de 8 rutas por ese increible(para lo bueno y malo) pais.
Gracias de nuevo
LaNaranjaViajera dice
Muchas gracias a ti!