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Roma en 2 días: Día 2

Nos despertamos pronto por la mañana. Hoy tocaba ver por dentro el Coliseo, no podíamos perdérnoslo! Pues encima al ser la semana de la cultura era gratis!

Aunque parecía que la cola era algo larga, fue bastante rápida, en unos 15 minutitos ya estábamos dentro. Para entrar al Coliseo había dos colas, una para gente que aún no tenía la entrada y la otra para gente que ya disponía de la entrada. Aunque la segunda cola era más larga, también era más rápida. Pero como digo, las dos fueron bastante rápidas y no eran exageradamente largas.

Los días normales, puedes escoger diferente tipos de entradas, también con guía o sin guía. Si escoges visitar el Coliseo por libre, recomiendo alquilar una audioguía en la misma taquilla. Vale 5,50€ y se puede escuchar sin auriculares o puedes enchufarle los tuyos si llevas. Así que nosotros lo compartimos. Gracias a las explicaciones que hacía la audioguía, la visita en el interior del Coliseo fue MUCHO más interesante.

Si bien es cierto que el interior del Coliseo es increíble, yo me lo esperaba más impresionante. Y sin audioguía, solo son un montón de piedras.

Coliseo

El Coliseo o Anfiteatro Flavio es el monumento más emblemático de Roma. Es un anfiteatro de la época del Imperio romano, construido en el siglo I y ubicado en el centro de la ciudad. Su denominación original, Anfiteatro Flavio, hace referencia a la dinastía Flavia de emperadores que lo construyó; su nombre posterior, Coliseo, y por el que es más conocido en la actualidad, se debe a una gran estatua que había cerca, el Coloso de Nerón, que no ha llegado hasta nosotros.

Por su conservación e historia, el Coliseo es uno de los monumentos más famosos de la Antigüedad clásica. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1980 por la Unesco y una de Las Nuevas Siete Maravillas del Mundo Moderno el 7 de julio de 2007.

El Coliseo se usaba para peleas de gladiadores, así como una gran variedad de eventos.

*Información sacada de Wikipedia

Una vez terminamos de visitar el Coliseo, cogimos el metro hasta la Plaza de España donde empezamos a hacer un recorrido turístico a pie.

La Plaza España de Roma está rodeada de edificios con colores rojizos, crema y ocre. En los años 50 se rodaron gran cantidad de escenas de películas.

El monumento más destacable y emblemático de la plaza es su gran Escalinata. Fue diseñada para unir la plaza con la iglesia francesa se impone en su parte superior.

Cada 8 de diciembre, el Papa visita la plaza y deja un ramo de flores a la Virgen María que hay visible en una columna romana.

Al pie de la escalinata encontramos también la Fontana della Barcaccia. Y aunque no se trata de una fuente demasiado llamativa, completa la plaza dando un aire especial a todo el conjunto que la rodea.

Continuamos nuestra ruta paseando por las calles comerciales de lujo de los alrededores de la Plaza de España. Pasamos por la Via del Condotti, Via del Corso y Via Frattina.

Si quieres, en Via del Condotti, puedes tomarte el café más caro de Roma (aun más caro que los del salón de te Babingtons, muy cerca de él). El Caffè Greco parece más un museo que una cafetería... En la carta pudimos ver que un expresso costaba 8€ y el capuccino 10€!!! Pero si no deseas pagar ese precio por un café, puedes hacer como nosotros, entrar como si buscaras mesa hasta el final de todo, dar media vuelta y volver a salir xD

El Caffè Greco es famoso por ser el lugar de encuentro de famosos artistas alemanes en el año 1779, entre ellos personajes tan conocidos como Mendelsson, Berlioz, Wagner, Liszt, Leopardi, Andersen... Pero no es de extrañar el precio del café si tenemos en cuenta que estamos en una de las calles de compras de marcas de gran prestigio.

Seguimos callejeando y pasamos por un centro comercial cubierto digno de admirar (todas las localizaciones las puedes encontrar en el mapa adjunto).

Pasamos por la Columna de Marco Aurelio, volvimos a ver la Fontana di Trevi (esta vez día), pasamos por las calles Via delle Muratte y Via di Petra hasta que se nos hizo la hora de comer y nos acercamos a un restaurante especializado en espagueti.

Al principio, La Spaghetteria L'Archetto Pizzeria, parece pequeña, pero está metida como dentro de una cueva y es gigante! Aunque su especialidad son los espagueti (tiene más de 100 salsas diferentes!!!!) también hacen pizzas. La calzone estaba de muerte! La mejor que he probado en mi vida!!! Y todo por 40€!

Con la barriga llena y feliz, nos dirigimos al metro para visitar la Ciudad del Vaticano. Bajamos en la parada de Ottoviano, andamos pocos minutos y llegamos a la imponente Plaza San Pedro.

Nuestra primera intención era no entrar en la Basílica de San Pedro, puesto que generalmente hay una cola increíble. Pero casualmente hoy había cero cola, así que decidimos aprovechar la ocasión y entrar a ver por dentro, la que seguramente es la iglesia más famosa e importante del mundo.

Preguntamos para ir a ver la Capilla Sixtina que estaba en los Museos del Vaticano, pero solo estaba abierta por la mañana (era domingo) así que, resignados, continuamos nuestro paseo por la Via della Conciliazione. Llegamos al Castillo San Angelo, paseamos por los puentes llenos de esculturas que salen del Castillo y por la orilla del río.

Castillo de San Angelo

Este Castillo también es conocido como el Mausoleo de Adriano o Mole Adrianorum. Iniciado por el emperador Adriano para ser su mausoleo personal y familiar, fue terminado por Antonino Pío.

La fortaleza también fue en su día el refugio del Papa Clemente VII durante el asedio y saqueo de Roma en el año 1527, que llevaron a cabo las tropas del rey Carlos I de España.

Para reposar de tanto trote (llevábamos desde las 8 de la mañana recorriendo la ciudad), aunque el tiempo no acompañaba demasiado, nos comimos un delicioso helado italiano en una cafetería que encontramos por la calle. El helado estaba delicioso!!!!

Cuando ya hubimos reposado, nos fuimos a buscar el metro para llegar de nuevo a Termini, donde tenemos nuestro hotel, en busca de un restaurante para cenar nuestra última noche en Roma.

La verdad que cogí el alojamiento en este barrio porqué quedaba muy cerca de la estación de tren y autobús (puesto que a las 4 de la mañana nos teníamos que ir para el aeropuerto) y también tenía una estación de metro. Pero la verdad es que es un lugar muy bueno para alojarse, lleno de locales, bares y restaurantes!

Nos decidimos por el restaurante Trattoria Grotta Amatriciana. Un lugar muy acogedor, comida buena y a buen precio. Volvimos a pagar unos 40€ los dos.

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